Cómo iniciarte en el yoga

¿Llevas tiempo queriendo iniciarte en la práctica del yoga pero no sabes por dónde empezar? Si es así, en Mathub te vamos a ayudar a empezar en el yoga, dándote una serie de tips que serán clave para que puedas disfrutar de esta disciplina milenaria originaria de la India desde cero, y de los múltiples beneficios que ofrece tanto a nivel físico como mental.

 

Tips para empezar en el yoga y no caer en el intento

Hazte con los accesorios adecuados

Los accesorios para yoga son indispensables para practicar esta disciplina en las mejores condiciones, de un modo seguro, eficaz y satisfactorio. Por ello, si vas a empezar en el yoga, el primer paso es hacerte con los accesorios necesarios. Entre ellos, el mat de yoga es el accesorio más importante, que es el nombre que recibe la alfombrilla o esterilla que se utiliza para realizar las diferentes posturas que deberás llevar a cabo. Es importante que sea un mat de látex que tenga el grosor adecuado, para así disfrutar de la estabilidad adecuada y de una mayor confortabilidad. Tras el mat, los bloques de corcho son otro accesorio altamente recomendable, que ofrece un soporte adicional para las manos que te será de gran ayuda para adaptar tu postura, y un plus de comodidad. Están diseñados para alargar, fortalecer y ofrecer un mejor apoyo, mejorando la práctica no solo del yoga, sino de cualquier otro deporte.

 

Paciencia

Debes tener en cuenta que en el yoga se avanza poco a poco, y que al principio puede parecerte más complicado de lo que creías. Por ello, debes ser paciente y no marcarte ningún objetivo antes de empezar, ya que de lo contrario es muy probable que acabes frustrándote, y que lo abandones antes de que comiences a disfrutarlo. Por mucho que acabes de empezar y sea una clase para principiantes, el yoga no es fácil, y deberás dedicarle tiempo para aprender, para saber escuchar a tu cuerpo y para mejorar. Si nunca lo has practicado antes, puedes empezar practicando yoga dos o tres veces a la semana, dejando siempre un día de descanso entre clase y clase, para que así el cuerpo pueda descansar y recuperarse. Si eres constante, verás como poco a poco vas mejorando y disfrutando cada vez más.

 

No te exijas demasiado

Siguiendo la línea anterior, al practicar yoga no debes exigirte demasiado, ya que de lo contrario es muy probable que sufras una lesión que te obligue a interrumpir la práctica. Con el yoga ejercitarás músculos que probablemente ni sabías que tenías, y que nunca antes habrás trabajado. Por ello, debes dejar que tu cuerpo se adapte a estos nuevos ejercicios y movimientos sin forzar. Asimismo, si has experimentado algún tipo de lesión o cirugía anterior, es importante que se lo hagas saber a tu instructor.

 

Observa y atiende

Cuando eres principiante, deberás observar detenidamente a tus compañeros, especialmente cuando practiquen posturas que no conoces y que nunca has realizado. Esto te permitirá aprender y te ayudará a mejorar. Eso sí, observa pero no te compares con el resto, especialmente si cuentan con una mayor experiencia, ya que tendrán una mayor flexibilidad y les resultará más sencillo hacer las diferentes posturas. De lo único que te servirá compararte es para frustrarte. Asimismo, debes atender a tu instructor y escuchar todas sus instrucciones. Nuestro consejo es que no trates de realizar las posturas a la vez que está explicando, ya que de este modo te resultará más difícil y, además, podría propiciarte alguna lesión, y que consultes cualquier tipo de duda que tengas.

 

La importancia de la respiración

Del mismo modo que para ciertos deportes tener una buena condición física es fundamental, en el yoga la respiración es muy importante, ayudando a regular tu estado mental, emocional y la concentración. Si aprendes a respirar correctamente, te resultará mucho más sencillo practicar las posturas más complicadas, y además respirar te ayudará a tranquilizarte y estar más preparado para afrontar situaciones con un elevado nivel de estrés. Para conseguirlo, trata de respirar empujando el abdomen hacia afuera al inhalar, y deja que vuelva hacia adentro con la exhalación. Al principio te resultará complicado, pero no te preocupes, ya que verás como con el tiempo irás cogiéndole el truco.

 

Ropa cómoda

No podemos decir que exista un atuendo ideal para el yoga, lo que sí podemos garantizar es que usar ropa cómoda es indispensable. Puedes optar ropa ceñida como mallas o tops, o ropa más holgada, escogiendo la opción que te resulte más cómoda, pero lo realmente importante es utilizar ropa que te ofrezca una total libertad de movimientos, para así poder realizar todos los movimientos necesarios para cada postura. Ten en cuenta que en el yoga deberás utilizar todas las partes de tu cuerpo.

 

Descálzate

Uno de los principales errores que cometen los principiantes es utilizar calzado deportivo. El yoga se practica descalzo, para así sentir una mayor conexión tanto con la superficie como con la práctica. Además, al ir descalzo evitas resbalarte o deslizarte sobre el mat, disfrutas de un mejor apoyo, de un mayor equilibrio y, por tanto, de una mayor seguridad.

 

Comienza con posturas básicas

Como en cualquier otra disciplina, al iniciarte en el yoga debes comenzar practicando posturas básicas, que no te exijan demasiado y que te permitan calentar tu cuerpo. El propio instructor te guiará, pero a continuación repasamos algunas de las posturas de yoga más básicas y elementales: tadasana, árbol, perro boca abajo, cobra, gato o sukhasna.

 

Practica

Por último, para ir progresando en esta disciplina, puedes practicar en casa lo que hayas aprendido en la última clase. Hazlo a tu ritmo y sin exigirte, siempre en un lugar cómodo y tranquilo que te ofrezca el espacio necesario para poder moverte con libertad y practicar las posturas de forma segura.